El concepto…

La “estimulación temprana”, habla que es un conjunto de técnicas educativas especiales empleadas en niños entre el nacimiento y los seis años de vida para corregir trastornos reales o potenciales en su desarrollo; o para trabajar las capacidades compensadoras. 

Las intervenciones contemplan al niño globalmente, y los programas se desarrollan teniendo en cuenta tanto al individuo, como a la familia y el entorno.

Todo nuestro mundo y nuestro ambiente, es un estímulo; y dependiendo del historial del niño o de la niña, y de como ha logrado evolucionar su sistema neurológico, se decide y planifica el tratamiento en base a la intervención o la estimulación temprana.

“La estimulación temprana supervisa un óptimo desarrollo neurológico”

¿Son necesarios?

Teniendo o no alguna alteración del neurodesarrollo, siempre la especie humana será vulnerables a los factores externos que nos dan vida, que nos nutren, que nos enseñan, y nos conduce a un fin determinado; ya que somos seres biopsicosociales.

Desde el útero, somos receptores de un sinfín de cosas. Por ejemplo: Un bebé que su madre no lo acepta, o uno donde la madre se ejercita adecuadamente; otro, un bebé cuya madre tuvo que estar en cama todo el embarazo por amenaza de aborto, y otro donde la madre siempre estuvo involucrada en el mundo de la música; todo esto repercutirá en el bebé; y es a lo que se le llama estimulación

Así no haya un programa formal de trabajo con el o la bebé, siempre estará expuesto a el ambiente, y ya depende de nosotros los padres buscar que todos esos factores externos le favorezcan o no.

Quiere decir, que son necesarios y son parte de nosotros… ¡Vivamos pues a plenitud con los estímulos!

¿Todos los estímulos son positivos?

Sean positivos o no, son estímulos. Y depende de cada individuo y del ambiente donde se encuentre a manejarlo de tal manera que pueda adaptarlo a la sociedad donde vive, e incluso potencializar aquellos talentos, y mejorar las deficiencias que puedan presenciarse.

El embarazo, lo que ocurra en el momento del nacimiento, lo que ocurra después del mismo, la psiquis de las madres en el periodo pre, peri y postnatal; el entorno familiar, el clima, el lugar, la posición que coloquen al bebé… En fin, toda causa trae una consecuencia positiva o negativa. Depende de nosotros como manejarlo.

El mundo esta infinitamente lleno de detalles que nos puede motivar, decepcionar, o incluso frustrar… Desde el momento de la concepción hasta que dejemos de respirar; esto define de alguna manera las diferentes características que poseamos; que quizás, siendo más conscientes del mismo, podríamos acoplar mejor a la sociedad, y habría mayor inclusión a los nuevos talentos, y de adaptación de los déficit; respetando y adaptando diferencias, ya que cada integrante en este mundo es un ser único y especial.

Quizás, a través de este pensamiento; podríamos mejorar el sistema educativo a nivel mundial; dando importancia a aquellos niños y niñas con dotes especiales. Podríamos canalizar de alguna manera un niño con déficit de atención a que sea un deportista excepcional, o probablemente a una niña autista que sea una esplendida científica; o simplemente ayudar a un niño típico con inteligencia kinestésica y visual con un ligero retraso del lenguaje, a que aprenda a leer y mejorar el habla.

Lo que quiero hacerles entender, que el neurodesarrollo y la estimulación, va más allá de una terapia, o de un eslogan de marketing; estos dos conceptos están para mejorar nuestra calidad de vida, para adaptarnos a las exigencias de la sociedad, y para poder destacar esos valiosos dotes que poseemos, desde el feto, hasta más allá de la edad adulta. Y es por esto que se debe ir con profesionales que sepan tratar estos temas para un mejor alcance, y contribuir de manera positiva en la sociedad.